Leo en ABC News que la FDA ha puesto un warning a dos productos utilizados en la inmunosupresión de los pacientes transplantados: Cellcept y Myfortic. Los motivos para este warning, están en los datos recibidos por la FDA el pasado octubre, en los cuales se habrían puesto de manifiesto los abortos o anomalías que afectarían a la boca y oídos.
Por estos motivos, la FDA ha recordado a los médicos, que antes de prescribir cualquiera de estos dos medicamentos, se tienen que asegurar de que la paciente no esté embarazada y que este utilizando adecuadamente métodos anticonceptivos.
Para Cellcept, es el segundo warning que reciben en pocas fechas, porque desde el mes pasado, la FDA investiga el caso de 16 pacientes que presentaron una enfermedad neurológica que estaban tomando este medicamento.
El grupo de fármacos utilizados en la inmunosupresión, es un claro ejemplo del balance beneficio-riesgo que presentan los fármacos. Si este tipo de medicamentos se utilizasen para los dolores de cabeza, nunca se habrían aprobado, ya que los riesgos serían muy altos para los beneificios que estarían aportando. Sin embargo, estos medicamentos se utilizan para personas que por una u otra razón han tenido la necesidad o la obligación de verse sometido a un transplante, siendo la medicación con inmunosupresores obligatoria para que nuestro organismo no rechaze el injerto. Los beneficios de estos medicamentos es el poder seguir viviendo, siendo estos los beneficios, los riesgos ahora sí que son asumibles.